Niña fue rescatada de una colonia indígena tras denuncia de supuesto maltrato

El líder de la comunidad indígena dijo que solo se trata de una tradición que tienen. El perito indígena explicó a Futura FM del por qué cortaron el cabello a la niña y aseguró que no es por maltrato.

La defensora Roselí Echeguren habló con Futura FM sobre el procedimiento de rescate de una niña indígena del pueblo Paĩ Tavyterã. Indicó que la misma niña y otra, fueronrescatadas la semana pasada de un inquilinato, donde supuestamente era explotada sexualmente.

Las niñas fueron entregadas nuevamente a sus familiares, sin embargo, esta semana nuevamente recibieron una denuncia de que una de las menores estaba siendo maltratada.

“Llegamos hasta la comunidad y la niña tenía rasgos de maltrato con el pelo cortado, pero el líder de la comunidad nos dijo que es una tradición, un ritual que es normal en su cultura, de igual manera llevamos a la niña para una inspección médica y contención psicológica”, dijo la defensora.

También mencionó que ellos no pueden hacer nada si se trata de una cultura, pero de igual modo, el Ministerio Público está investigando el caso, indicó.

Por su parte, Digna Morilla, Perito Indígena, explicó la tradición que tiene su pueblo y aclaró que no es ningún castigo ni maltrato.

“Ella se escapó de su casa y se la llevó de vuelta a su casa, cuando regresó tuvo su primer periodo y ahí su mamá le cortó el cabello y le metió a la casa, porque se debe resguardar 40 días, pero una vecina les denunció, pero es nuestra cultura, tanto para varón, como para mujer”, dijo el perito.

Según su tradición, en el primer periodo, la mujer es sentada en la puerta de la casa y la abuela le corta el cabello cortito, luego los padres ponen una cortina para que nadie le vea a la niña y ella a los demás. “El abuelo lleva un algodón grande y de eso se hace hilo y luego hamaca, eso hace una mujer durante los 40 días”, indicó.

En cuanto a la alimentación también es diferente por ese tiempo, ya que no deben comer carne ni frituras, ni sal.

“Cuando llega los 40 días, el líder de la comunidad debe rezar por la mujer y luego salir corriendo e ir a bañar en el arroyo, perseguido por un niño, a la vuelta lo mismo. Al llegar a la casa, nuevamente el líder reza por nosotros”, dijo Digna.